Bajo el hashtag #TablaSinde David Bravo –@dbravo– dejaba caer ayer a mediodía en Twitter el preaviso de un enigmático experimento cuyo propósito y naturaleza no serían desvelados ni iniciados hasta las 4 de la tarde, justo al inicio de la conferencia del Festival de cine de San Sebastián, a la que asistiría como invitado. Mucho antes de que llegara el momento clave, ante la intriga de la gente el asunto ya se había convertido en trending topic.
Llegada la hora de la verdad, nada más comenzar el evento David Bravo tuiteaba su objetivo: durante la hora que duraba la conferencia pretendía crear una web de enlaces a películas para demostrar que la polémica Ley Sinde es inútil en el más estricto sentido de la palabra inútil. Básicamente consistía en crear mediante una sencilla hoja de cálculo de Google Docs, una tabla (de ahí el nombre del hashtag) para que los internautas pudieran escribir los nombres de las películas favoritas junto con su correspondiente enlace de descarga gratuita. Pues bien, no sólo ha conseguido su propósito sino que junto a su compañero Javier de la Cueva –@jdelacueva– han tenido que crear un total de 20 hojas para poder satisfacer todos los accesos solicitados, con cientos de enlaces en cada una.
¿Y con esto qué se pretende demostrar? Pues como dice De la Cueva, que la ley "tal y como está redactada obliga al cierre de Google", simple y llanamente. Está claro que nuestra ministra de cultura no entiende de qué va esto. Si sin casi premeditación y en apenas una hora se han llegado a publicar alrededor de 4000 enlaces a descargas (a unas 200 entradas por hoja) en una de las plataformas mas públicas, más legales y más poderosas del mundo, ¿qué cree que va a hacer Sinde con su ley? Seguro que cerrar Google no entraba dentro de sus objetivos. Lo primero de todo es tener claro cómo funciona la tecnología hoy en día y actuar acorde a sus posibilidades. La cuestión no es atacar a los medios de difusión del delito, sino a los que realmente delinquen alojando películas de forma ilícita. Cerrar una web que distribuye enlaces a descargas es como impedir hablar a alguien que te dice dónde hay gente haciendo top manta. Absurdo, ¿verdad?
Llegada la hora de la verdad, nada más comenzar el evento David Bravo tuiteaba su objetivo: durante la hora que duraba la conferencia pretendía crear una web de enlaces a películas para demostrar que la polémica Ley Sinde es inútil en el más estricto sentido de la palabra inútil. Básicamente consistía en crear mediante una sencilla hoja de cálculo de Google Docs, una tabla (de ahí el nombre del hashtag) para que los internautas pudieran escribir los nombres de las películas favoritas junto con su correspondiente enlace de descarga gratuita. Pues bien, no sólo ha conseguido su propósito sino que junto a su compañero Javier de la Cueva –@jdelacueva– han tenido que crear un total de 20 hojas para poder satisfacer todos los accesos solicitados, con cientos de enlaces en cada una.
¿Y con esto qué se pretende demostrar? Pues como dice De la Cueva, que la ley "tal y como está redactada obliga al cierre de Google", simple y llanamente. Está claro que nuestra ministra de cultura no entiende de qué va esto. Si sin casi premeditación y en apenas una hora se han llegado a publicar alrededor de 4000 enlaces a descargas (a unas 200 entradas por hoja) en una de las plataformas mas públicas, más legales y más poderosas del mundo, ¿qué cree que va a hacer Sinde con su ley? Seguro que cerrar Google no entraba dentro de sus objetivos. Lo primero de todo es tener claro cómo funciona la tecnología hoy en día y actuar acorde a sus posibilidades. La cuestión no es atacar a los medios de difusión del delito, sino a los que realmente delinquen alojando películas de forma ilícita. Cerrar una web que distribuye enlaces a descargas es como impedir hablar a alguien que te dice dónde hay gente haciendo top manta. Absurdo, ¿verdad?
No hay comentarios :
Publicar un comentario